La electrónica automotriz es un área del conocimiento tecnológico, que abarca diferentes sistemas de los vehículos automotrices, maquinaria móvil y estacionaria, centrándose por un lado en detectar fallos, el servicio y mantenimiento, como también en la reparación de elementos del circuito eléctrico de carga, arranque, luces y/o accesorios del vehículo.
Hoy en día, la electrónica no solo pertenece al grupo de vehículos automotrices, sino que además se amplió al ámbito de camiones y vehículos de pasajeros, disponiendo de una serie de componentes eléctricos agrupados por circuitos, y conectados mediante una instalación eléctrica y/o de redes computacionales de conexión (multiplexado). Estos avanzados módulos computacionales per-siguen asegurar en las unidades motrices: funcionamiento efi-ciente del motor, gestión de los componentes de chasis-carrocería y asegurar a los ocupantes que se ubican en su interior como de los vehículos y peatones que puedan anteponerse en la ruta del vehículo.
Cuando las señales de los módulos de control que administran las señales de sensores, recopilan datos alterados de variables físicas, desde los sensores traductores (presión, temperatura, vibración, rpm, etc.), o químicas, vinculadas al monitoreo de eficiencia de catalizadores, se emiten códigos DTC que se pueden interpretar en una herramienta electrónica de diagnóstico, o por el titilar de la luz Check que se muestra en el tablero o sinóptico de instrumentos.
Siendo más de 100 los sensores que se vinculan con las gestiones funcionales del vehículo, es necesario disponer de protocolos de información para su detección de fallas, uno de ellos es el formato OBDII (On Board Diagnostic). Para acceder a él, se pueden encontrar variados métodos, desde la conexión física, o a través de señales ethernet o bluethoot.
Módulo de Control Electrónico (ECM)
En inglés, Electronic Control Module en realidad es un término genérico que usualmente hace referencia a la unidad central que procesa información de los indicados en el cuadro anexo.
Analicemos cómo se puede interpretar el funcionamiento del Sistema De Distribucion de Frenado-EBD en un vehículo.
Distribución Electrónica de frenada
El sistema de distribución electrónica de frenada, conocido por EDB, se basa en el principio de que no todas las ruedas tienen que hacer el mismo esfuerzo para lograr frenar adecuadamente.
El peso que soportan las ruedas del automóvil no se reparte uniformemente y las ruedas que soportan más peso, necesitan mayor presión para lograr la buena frenada. También tenemos que considerar, que la carga del vehículo se mueve, lo que conlleva un cambio en la fuerza y potencia de la rueda.
En esta situación, el sistema EBD es capaz de detectar en milésimas de segundos, cambios significativos en la carga o peso de los ejes, la velocidad del vehículo, las rpm de cada rueda, la presión de neumáticos y las condiciones de conducción aportadas en la transmisión y el motor. Con ello puede discriminar qué acción debe ejecutarse en el sistema de control ABS, para frenar o soltar las pastillas de freno.
Cuando el vehículo frena, su peso se mueve hacia delante y si dispone de un motor delantero, el peso en eje delantero aumenta, y a su vez la adherencia de los neumáticos delanteros, mientras que reduce la adherencia de los neumáticos traseros. Al perder adherencia las ruedas traseras se deslizan, lo que provoca trompos o movimientos de coleteo.
Aquí es donde entra en juego el EBD, una unidad de control electrónico (ECU) determina la relación de deslizamiento de cada uno de los neumáticos de forma individual. Si la ECU recibe que las ruedas traseras están en peligro de deslizamiento, se aplica menos fuerza (o se aumenta) sobre ellas manteniendo al mismo tiempo la fuerza aplicada a las ruedas delanteras.
EBD también actúa cuando el automóvil está frenando en una curva. Mientras gira, las ruedas exteriores del automóvil giran más rápidamente que las ruedas interiores. Si la fuerza de frenado aplicada sobre las ruedas internas es alta, pueden bloquearse, crean sobreviraje y perder control. El EBD puede detectar el deslizamiento de las ruedas interiores y reducir la fuerza de frenado en ellas, sin reducir la fuerza sobre las ruedas exteriores.
Este sistema se complementa y permite mayor control en maniobras evasivas de emergencia con el sistema ABS de frenos.