Por Marco Soza, INACAP.
En nuestro país, las normativas de emisiones en vehículos automotrices se asignan según las Normas Euro y homólogas americanas de Tier y/o EPA. Haciendo un poco de historia, las normas EURO se focalizan desde sus orígenes en 5 marcadores de las emisiones de los vehículos:
CO, monóxido de carbono: se trata de un gas que se produce por una combustión incompleta de un hidrocarburo. Es muy tóxico y contaminante.
HC, hidrocarburos: se trata de restos de combustible sin quemar que salen por el tubo de escape.
HC, hidrocarburos: son gases que combinan los hidrocarburos sin combustionar. Son de peso molecular alto y son producto de aceites que se combustionan por filtraciones hacia la cámara de combustión.
NOx, óxidos de nitrógeno: se trata de moléculas que se forman debido a las elevadas temperaturas y presiones de trabajo en las cámaras de combustión de los motores modernos. Hay varios tipos de moléculas que se pueden formar, por eso se usa una x, ya que su fórmula puede variar (NO, N2O, etc.) son muy contaminantes y tienen un peligro especial en los seres vivos, ya que cuando los respiramos, se convierten en ácidos que entran en nuestras vías respiratorias.
PM, partículas sólidas o aerosoles: son productos sólidos muy pequeños que son expelidos por los vehículos. Esa densa nube de humo negro que sale del escape de un microbús, un furgón, camioneta o un sedán no es la única fuente. También lo son las pastillas de freno, el rozamiento de los neumáticos contra el asfalto, el propio polvo que hay en el asfalto y el esparcido por las ruedas al pisarlo. Dentro de estas partículas hay algunas más nocivas que otras. Las más peligrosas son los benzopirenos, un tipo de cenizas que son muy cancerígenas. En general, prácticamente cualquier partícula lo bastante pequeña como para introducirse en nuestro organismo y entrar en contacto directo con nuestras células pulmonares o naso faríngeas es un peligro potencial.
EL AÑO DEL CAMBIO-2022
Desde el 30 de septiembre de 2022, Chile se convierte en el primer país en Sudamérica en implementar la exigente norma de emisiones Euro 6 para vehículos livianos y medianos, estableciendo una de las normas más avanzada en materia de protección medioambiental, y que rige en Europa desde el 2014.
Claramente, los cambios tecnológicos que apuntan a la sostenibilidad que las marcas automotrices pretenden imponer en sus estrategias de desarrollo tecnologías y de ventas.
La norma chilena, basada en las Euro, se implementa en dos fases: Primero con la norma Euro 6b (o su equivalente Tier 3 bin 125) para vehículos livianos y medianos, cuyo primer hito de implementación se cumple desde el mismo 30 de septiembre, y luego con la norma Euro 6c (Tier 3 bin 70) que es la más exigente en los países desarrollados y que necesita, para su implementación, mejorar la calidad de los combustibles en Chile a un estándar de 10 ppm de azufre, exigencia en la que deben trabajar los Ministerios involucrados directamente. Con ello, nuestro país continúa a la vanguardia en las mayores exigencias medioambientales tanto para calidad de combustibles, como para normativas de emisión.
Posteriormente, desde marzo de 2023, sólo se permitirá la inscripción de nuevas unidades que cuenten con dicha tecnología acreditada ante el Centro 3CV, dependiente del Ministerio de Transportes. Finalmente, la fase 2 del programa o Euro 6c, se exigirá a contar de septiembre de 2024 para todos los modelos cuya primera inscripción se practique en el territorio nacional.
BENEFICIOS DE LA NORMA EURO 6
Estudios recientes han recogido el beneficio de incorporar tecnologías anticontaminación de vanguardia como el caso de Euro 6, pues reduce en un 56% las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOX) y de material particulado (PM) emitidas por los vehículos livianos y medianos en comparación con lo establecido por la anterior norma Euro 5, estableciendo un procedimiento de pruebas más exigente, con un ciclo de pruebas a velocidades más altas, aceleraciones y desaceleraciones más dinámicas y simulaciones de conducción bajo los últimos parámetros de la industria, así como condiciones de medición del vehículo más estrictas.